viernes, 11 de mayo de 2012

Iglesia Católica, Banca y Justicia

RAFAEL GONZÁLEZ MORERA



Estoy cansado de decirles que sigo pensando que la Iglesia Católica, la Banca y la Justicia siguen ancladas en el franquismo. Cómo no quiero ser pesado les prometo que de ahora en adelante me voy a coger semanas caribeñas un poco ampliadas, en plan Carlos Dívar y tal, aunque en mi caso tendré que conformarme en ir al Sur de jueves a martes, o quedarme en Las Canteras, porque no tengo a ninguna institución que me pague un cachondeo fino en Marbella. Pero como comprenderán, no me voy a extender en críticas a los viajes del Presidente del Tribunal Supremo, el señor Dívar, líbreme Dios, que no quiero que la señora Gabriela Navarro, portavoz del Consejo General del Poder Judicial, me meta una filípica o lo que es peor, una querella de tomo y lomo, que la pensión no me da para mucho más que comerme unos longorones y tal en Las Canteras. Y no pienso confesar en donde disfruto de los clandestinos longorones, que está prohibida su pesca, y en boca cerrada no entran moscas.
Si saco de nuevo el tema de las tres instituciones que creo siguen con el reloj parado en el franquismo es porque las noticias a veces son coincidentes, y en el caso de la Iglesia Católica un cura amigo mío me alerta de un excelente artículo publicado en “Redes Cristianas” en su última edición digital, que invito a leer a mis sufridos lectores. En el artículo el cura canario amigo me resalta las diferencias de los curas y los católicos de base, en relación a la jerarquía de la Iglesia, y el silencio de los Obispos ante la crisis que vive el pueblo. Y para terminar el panorama de las tres instituciones que no se han puesto al día, les remito a las noticias que van saliendo sobre el agujero, socavón, o vaya usted a saber la tal dimensión, de Bankia, que ahora mismo los economistas no se ponen de acuerdo si es una cima o una sima, que lío madre mía.
Me tropiezo con mi vecina del quinto en Farray, y le cuento mis dudas agnósticas y hasta económicas, y sin anestesia va y me dice “lo veo cada vez más despistado, mire, ya le dije hace tiempo que tiene que dejarse de escribir boberías, ir más a la zona nudista de Maspalomas a alegrar el ojillo, que hace tiempo no lo veo por allí, dedicarse a la buena gastronomía y enología, y a Carlos Dívar, Rodrigo Rato y Antonio María Rouco Varela, que Dios los juzgue el Día del Juicio Final, que dice mi abuela que está cerca, el 12/12/2012”. Me fui a Punta Brava recordando a Manolo Padorno, y caminé luego a El Charcón en donde me pareció ver a José Luis Gallardo nadando hacia la Peña de la Vieja. Recuerdos…

No hay comentarios:

Publicar un comentario