miércoles, 26 de junio de 2013

Los paises del BRICS, en potente emergencia MAPAS CHINOS EN AFRICA

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Aumentar tamaño del texto Disminuir tamaño del texto Partir el texto en columnas Ver como pdf26-06-2013




La reciente celebración, en la ciudad sudafricana de Durban, de la quinta cumbre del grupo de países denominados BRICS ha inaugurado un nuevo escenario donde sus miembros han anunciado con claridad su intención de trabajar por un nuevo orden internacional. El encuentro tuvo por objetivo la discusión sobre el desarrollo y la industrialización, junto a la cita con los países del continente impulsada por la Unión Africana; no en vano, la conferencia se celebró bajo el lema de la “cooperación con África”. Estuvieron presentes el sudafricano Jacob Zuma, la brasileña Dilma Roussef; Vladímir Putin, el nuevo presidente chino, Xi Jinping, y el indio Manmohan Singh.Muchas cosas han cambiado desde la primera cumbre (que se celebró en la ciudad rusa de Yekaterinburg, en 2009) de unos países que, si bien tienen grandes diferencias entre sí, comparten en lo esencial el rechazo al actual sistema financiero internacional, al predominio norteamericano en las instituciones surgidas en la postguerra mundial, y a unas relaciones económicas que fuerzan a utilizar el dólar estadounidense como moneda de pagos y de reserva internacional, y que, en fin, defienden el papel de la ONU como garante de la paz y árbitro de las disputas, frente a la política de fuerza que han llevado a cabo Washington y algunas naciones europeas como Gran Bretaña y Francia. En suma, los cinco países de Durban postulan un sistema multilateral que rompa con las inercias del pasado y sea más equilibrado entre viejas y nuevas potencias. Su creciente protagonismo, incluso, ha llevado a Egipto a solicitar su incorporación, aunque los BRICS no piensan en articular una organización convencional, una nueva estructura internacional añadida a las existentes, sino en impulsar acuerdos de desarrollo desde las diferencias entre los cinco países.
No faltan, pese a ello, las voces que califican a los países BRICS como “cómplices del neoliberalismo” que, supuestamente, refuerzan el poder norteamericano, y la construcción de infraestructuras que llevan a cabo en África es considerada el requisito imprescindible para una nueva “explotación neocolonial” de las riquezas mineras y de hidrocarburos, en una suerte de nueva Conferencia de Berlín (en referencia a la celebrada en la capital prusiana en 1885). Curiosamente, muchas de esas críticas expresadas desde la izquierda coinciden con las difundidas por los grandes medios de comunicación internacionales que amplifican el discurso de Washington y de Bruselas, sin que esa izquierda tenga en cuenta que la mayoría de los BRICS no apuesta, hoy, por un modelo económico alternativo al capitalismo, con la excepción de China, que mantiene su propio camino al socialismo. Eso explica la actuación de las empresas de esos países, que buscan el fortalecimiento de sus economías nacionales, y que, en general, actúan con criterios de rentabilidad. El papel de Putin es el de portavoz de la nueva burguesía rusa; Jacob Zuma es el valedor de la nueva identidad del Congreso Nacional Africano, una compleja aglomeración de fuerzas donde conviven la nueva burguesía negra enriquecida, como la que representa Cyril Ramaphosa, vicepresidente del CNA, y el alma de izquierdas de la lucha contra la segregación racial; la India del Partido del Congreso defiende también una visión neoliberal, escindida entre la vieja relación con Moscú, la atracción por el rápido desarrollo chino y la desconfianza histórica hacia Pekín, y los cantos de sirena de Washington; y el Brasil de Lula y Roussef (ésta, con orígenes guerrilleros) apuesta por el desarrollo nacional y la visión de Brasil como potencia regional con intereses mundiales, rasgo que le distancia y le enfrenta a Estados Unidos. China continúa defendiendo su condición de país socialista.
En Durban, China y Brasil suscribieron un acuerdo para la utilización de sus propias monedas en los intercambios comerciales, convenio que puede estimular una dinámica de relación económica con otros países, en detrimento del dólar norteamericano. China se ha convertido en el principal socio comercial de Brasil. La cumbre sudafricana acordó la creación de un banco para el desarrollo que dispondrá de un capital inicial de 50.000 millones de dólares, aunque su definitiva puesta en marcha se dejó al examen posterior, y la idea de crear un Fondo Anticrisis dotado de 100.000 millones de dólares se pospuso, en una muestra de las complejas relaciones entre los BRICS. El banco de desarrollo (una idea del gobierno hindú) impulsado por el foro de Durban pretende convertirse en una alternativa al Banco Mundial y al FMI, según indicó el ministro brasileño de Hacienda, Guido Mantega, y su objetivo sería el fomento de las infraestructuras. También fue abordada la creación de una agencia de calificación de riesgos que permita escapar al monopolio norteamericano en ese campo: aunque China dispone de la Dagong Global Credit Rating, son las tres agencias norteamericanas (Standard & Poor'sMoody's y Fitch Rating) quienes controlan más del noventa por ciento de la actividad, con enormes repercusiones económicas y financieras.
Las posibilidades del grupo BRICS fueron subrayadas por Putin: dispone del cuarenta por ciento de la población mundial, de casi el treinta por ciento de la producción, y crece de forma notable, mientras los países del viejo G-7 permanecen estancados en la crisis. Además, aumenta la colaboración en iniciativas científicas, tecnológicas y de investigación y desarrollo del cosmos, proyectos médicos (India, por ejemplo, produce medicamentos baratos y de buena calidad), y el grupo ha decidido impulsar el crecimiento en África, la transferencia de tecnología, y la concesión de créditos al desarrollo. De igual forma, el creciente comercio entre los países miembros, utilizando sus monedas y no el dólar, contribuirá decisivamente al debilitamiento de la moneda norteamericana; sin olvidar, por ejemplo, que China puede contribuir de forma decisiva a la urgente construcción de las infraestructuras indias, una de las principales debilidades de la India.
Esos intereses comunes no deben hacer olvidar que el grupo BRICS está compuesto por países con sistemas muy diferentes y que tienen evidentes puntos débiles, por no hablar de notorias contradicciones. Sudáfrica, por ejemplo, votó en 2011 junto a Estados Unidos en el Consejo de Seguridad de la ONU para autorizar los bombardeos de la OTAN sobre Libia. Pese a ello, la articulación de los BRICS y la apuesta conjunta por una nueva arquitectura política y económica mundial es una excelente noticia, y aunque Rusia, India, Brasil y Sudáfrica no discuten muchos de los aspectos de la globalización impuesta por Occidente, y mantienen dependencias económicas con los principales países capitalistas, mantienen una cierta autonomía financiera respecto del sistema mundial controlado por Washington, Londres y Bruselas. No es así para China, cuyo sistema financiero y bancario es enteramente público, y que ha sido capaz de construir una estructura industrial que está, sustancialmente, en manos del Estado. El sistema nacido en Bretton Woods recibe así la indicación de que su tiempo termina: tanto el Banco Mundial, como el Fondo Monetario Internacional, el papel del dólar, y la propia hegemonía de Estados Unidos y de Europa, son cuestionados de forma abierta.
La cita de los BRICS en África imponía la agenda de la reunión, porque los problemas africanos no admiten espera, y el interés de esas potencias emergentes en el continente negro abre nuevas posibilidades, aunque también muchos riesgos. La ronda de Doha no avanza en la solución a los problemas agrícolas, y, cincuenta años después de las independencias, las abundantes riquezas del continente no han servido para cambiar sustancialmente la pobreza africana, pese a mejores parciales y al retroceso del hambre. Pese a todo, en los últimos años, la tasa de crecimiento africana ha alcanzado el cinco por ciento, aunque el modesto punto de partida limita el desarrollo.
China, la principal potencia de las que se reunieron en Durban, tiene un protagonismo evidente en el futuro de África, y el primer viaje al exterior de Xi Jinping ha sido revelador: Rusia y África (Tanzania, Congo-Brazzaville y Sudáfrica). Además, la asociación estratégica entre Moscú y Pekín se ha consolidado: Andrey Denisov, viceministro ruso de Asuntos Exteriores, enfatizó que todas las fuerzas políticas rusas están de acuerdo en fortalecer la relación con China, lejos ya de las apocalípticas e interesadas profecías occidentales sobre una “invasión amarilla” en Siberia. Xi Jinping, que comienza su mandato, ha sido criticado en medios informativos internacionales y cancillerías occidentales por haber mostrado su pesar por la desaparición de la Unión Soviética, y por sus frecuentes citas de Mao.
Las relaciones africanas con Pekín se iniciaron en los años de Bandung, y, hoy, China se ha convertido en el principal socio comercial de África: en 2011, la cifra de intercambios alcanzó casi los 170.000 millones de dólares, con un crecimiento espectacular: se ha multiplicado casi por veinte en el plazo de la primera década del siglo XXI. En conjunto, Sudáfrica protagoniza casi la tercera parte de los flujos comerciales con Pekín. China está hoy presente en prácticamente todos los países africanos, aunque la envergadura de los proyectos y de las inversiones depende de muchos factores, y otorga créditos a bajo interés para el desarrollo económico; más de dos mil empresas chinas trabajan en infraestructuras, construcción, minería, energía. China es, desde 2009, el principal socio del continente africano, y no es una casualidad que la incorporación de Sudáfrica (la economía africana más dinámica) al BRICS fuera propuesta por Pekín. India y Brasil tienen también una significativa y creciente presencia en el continente negro: Brasil, por ejemplo, está explotando uno de los yacimientos de carbón más grandes del mundo (en Tete, Mozambique) a través de la multinacional carioca Vale, una de las compañías mineras más grandes del mundo, y las comunidades indias en África son un creciente estímulo para las empresas hindúes. Los intercambios económicos entre China y África son cada año mayores: en 2012, el comercio entre ambos llegó ya a los 200.000 millones de dólares, y el programa de créditos chinos a países africanos, previsto hasta 2015, supera los 20.000 millones de dólares.
África es un escenario de competencia sin cuartel entre las grandes potencias, lo que explica guerras y conflictos, aunque los intereses locales y el papel de caudillos, señores de la guerra y dictadores, juegan también un papel muy relevante. Así, la división del Sudán en dos países no se explica sin los intereses petroleros norteamericanos, y la situación en Nigeria y en Angola, grandes productores de petróleo, no es ajena a la actuación de las multinacionales occidentales. En ese marco, la política seguida por las potencias del BRICS, y, singularmente, por China, es la del pragmatismo y la no injerencia en los asuntos internos, en un complicado equilibrio, pese a que ello obliga a mantener relaciones con presidentes como Yoweri Museveni (protagonista de las rebeliones contra Idi Amin, junto a Nyerere, y contra Milton Obote), reelegido en elecciones fraudulentas, o con el presidente de Zimbabwe, Robert Mugabe, dirigente de la independencia, implicado hoy en flagrantes casos de corrupción, sin olvidar que la Sudáfrica libre de Mandela, Mbeki y Zuma no ha acabado con la corrupción, las matanzas (como la que causó la muerte de treinta y cuatro mineros en la mina de platino de Marikana, en agosto de 2012) y la tortura.
Xi Jinping se reunió con Museveni, presidente de Uganda, así como con Armando Guebuza (dirigente del FRELIMO y presidente mozambiqueño), y con Hailemariam Desalegn, primer ministro etíope y actual presidente de la Unión Africana. Reforzar la cooperación china con Etiopía, Mozambique y Uganda estaba entre las previsiones del viaje del presidente chino. El primer ministro etíope enfatizó que su país confía en China para impulsar su desarrollo, y la cooperación china en Mozambique cuenta con importantes proyectos en infraestructuras, agricultura y energía. El presidente chino anunció que su país formará a treinta mil técnicos y profesionales africanos, y que esa educación irá acompañada de transferencias de tecnología. Durante la visita de Xi Jinping a Tanzania se firmaron acuerdos para la construcción de puertos, hospitales y centros culturales, y el presidente tanzano, Jakaya Kikwete, afirmó: “No dudamos de que China continuará trabajando con el pueblo africano”, al tiempo que calificaba a quienes critican la actuación china en África de estar anclados en los años de la guerra fría.
Tanzania desempeña un papel muy relevante en la estrategia china en África. En septiembre de 2011, el gobierno tanzano propuso a Pekín la construcción de un gasoducto de quinientos cuarenta kilómetros entre las ciudades de Mtwara y Dar es Salaam, a lo largo de la costa del océano Índico, proyecto que supone una inversión de más de mil doscientos millones de dólares sufragada con un crédito bancario chino. El acuerdo para el desarrollo firmado con Tanzania supone inversiones por valor de 10.000 millones de dólares, aunque las cancillerías occidentales filtraron a los medios de comunicación que el interés de Pekín radicaba en el futuro uso militar de un puerto tanzano. En realidad, la construcción del puerto de Bagamoyo, frente a la isla de Zanzíbar, es una iniciativa civil que pretende el desarrollo comercial. En todo el continente, China construye carreteras, centenares de kilómetros de vías férreas, puertos, colegios y hospitales, explota yacimientos, contribuye al desarrollo agrícola y forma a decenas de miles de nuevos técnicos de países africanos, además de enviar numerosas misiones médicas, dentro de un esquema de colaboración que contempla la búsqueda del mutuo beneficio, como recuerdan los responsables del gobierno chino.
Tras la cumbre del BRICS, Xi se reunió con Denis Sassou Nguesso, presidente congoleño, país que espera desarrollar su infraestructura ferroviaria y sus carreteras con ayuda china: Pekín se ha convertido también en el principal socio comercial del Congo-Brazzaville. Sassou Nguesso (un presidente de orígenes marxistas, y dirigente del Partido Congolés del Trabajo) descalificó las acusaciones occidentales sobre el supuesto “colonialismo” chino, afirmando que los africanos conocen perfectamente el colonialismo por su experiencia histórica. El presidente chino aseguró que su país continuará su colaboración con África, impulsando la paz y el desarrollo, y apostando por un mayor protagonismo del continente en las instituciones internacionales, frente a la marginación a que Occidente sometió a los africanos. Para ello, China cuenta con unas reservas que superan los 3’3 billones de dólares: más que el conjunto de Europa, y el nuevo presidente chino ha puesto de manifiesto que no apuesta por un mundo gobernado por un G-2, Washington y Pekín, como gustaría en la Casa Blanca.
Helen Clark, que fue presidenta del gobierno de Nueva Zelanda, y, hoy, es administradora del PNUD, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, mantiene que la cumbre de los BRICS es una oportunidad para África y, también, la muestra de los rápidos cambios en los equilibrios planetarios. Por su parte, Donald Kaberuka, un economista ruandés, presidente del Banco Africano de Desarrollo, ve en la colaboración de los BRICS una magnífica posibilidad de crecimiento para África, aunque Lamido Sanusi, gobernador del banco central nigeriano y hombre ligado a los intereses occidentales, criticaba (en un reciente artículo que publicó en marzo de 2013 en el Financial Times) la actitud de China: “China se lleva nuestras materias primas y nos vende los productos manufacturados. Esta fue también la esencia del colonialismo”. Pese a ello, Sanusi no deja de reconocer que China está creando importantes infraestructuras en África, y no defendía el fin de la relación africana con Pekín. Sin embargo, al criticar el supuesto “colonialismo” chino, Sanusi ignoraba deliberadamente las diferencias de actitud entre el colonialismo occidental y la actuación de Pekín en África: China no dispone de un solo soldado en el continente, no ha incorporado ningún territorio como colonia, y, además, compra las materias primas y los productos africanos, frente al histórico expolio occidental, y se ha convertido en el país del mundo que más créditos concede a los países en desarrollo, sin exigencias económicas y políticas como las que imponen el Banco Mundial, el FMI o Estados Unidos. En contraposición, no hay que olvidar que Occidente invadió África, se apoderó de países enteros, los convirtió en colonias sujetas al poder de la metrópoli, y robó durante décadas las materias primas del continente e impuso formas de conducta regidas por la corrupción y el soborno, por no hablar de que la intervención militar continúa, y que Estados Unidos ha forzado en los últimos años a más de una decena de países africanos (desde Egipto, Marruecos y Argelia, a Kenia, Gambia, Somalia y Sudáfrica) a colaborar con su programa de cárceles secretas y de secuestros extrajudiciales en nombre de la política “antiterrorista”. Las diferencias entre Washington y Pekín son evidentes.
El consenso de Washington ha muerto, aunque su cadáver siga apestando las instituciones internacionales con su fanatismo de mercado y su énfasis en la desregulación y el ataque a los derechos cívicos y a las conquistas sociales de los trabajadores. Frente a ello, el nuevo consenso de Pekín se revela atractivo para buena parte del mundo en desarrollo, y singularmente para África, con sus ideas sobre la planificación centralizada y un rápido desarrollo que si bien tiene inevitables hipotecas del pasado, apuesta por unas nuevas relaciones internacionales, por otro sistema financiero, y por un modelo de conducta que renuncie a la fuerza y a las intervenciones militares. La vieja y dolida reflexión de Julius Nyerere (“No necesitamos ayuda de Occidente. Basta con que levante su bota de nuestro cuerpo”) ilustra todavía la forma en que África busca el futuro, desconfiando de las viejas potencias coloniales y de Washington, y ayudándose con mapas chinos.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

martes, 25 de junio de 2013

Entrevista del diario PÚBLICO al Profesor Vicenç Navarro, 21 de junio de 2013

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EL OLVIDO HISTÓRICO: CAUSAS Y CONSECUENCIAS

(P.)
Usted ha sido muy crítico del olvido histórico. ¿No cree que hubiera sido mejor no mirar al pasado?
(R.)
No. Antes al contrario. La política del olvido ha sido un proyecto exitoso de reproducir y promover la visión de España de los ganadores de la Guerra Civil. Le citaré un ejemplo. Me invitaron recientemente a dar una conferencia en Tortosa, la capital de la comarca del Baix Ebre. Y pude ver, una vez más, que la juventud sabía muy poco de lo que había ocurrido en aquella parte de Catalunya durante la II República y después. El Baix Ebre era –y continúa siendo- la Andalucía de Catalunya. Había una enorme concentración de la propiedad de las tierras, con las grandes familias terratenientes dominando la economía de la región. La República intentó cambiar esta situación a través de la Reforma Agraria, cambiándose las relaciones de propiedad. Ni que decir tiene que fue un proceso complejo, no libre de errores. Pero fue un intento serio de cambio en las relaciones de propiedad de la tierra.
El golpe militar cambió todo esto, inició una represión brutal revirtiendo la propiedad a los terratenientes que, junto con la Iglesia y el Ejército, dirigieron tal represión, una de las más feroces que haya existido en España y en Europa. Hoy estos terratenientes y la Iglesia católica continúan ejerciendo un enorme poder. Como dijo un anciano militante socialista que estaba en el Salón de Actos donde dí la conferencia, “aquí mandan los de siempre”. Pues bien, los estudiantes universitarios de aquellas tierras apenas sabían todo esto. Este olvido beneficia, sin lugar a dudas, a las fuerzas conservadoras.
(P.)
¿Y cómo puede entenderse esta situación?
(R.)
Por el miedo. No hay plena conciencia de la brutalidad que significó la dictadura en España. Según el experto en fascismo en Europa de la Columbia University, de Nueva York, en EEUU, el profesor Malekafis, por cada asesinato político que cometió Mussolini, Franco cometió diez mil. Aquella dictadura fue un baño de sangre. El objetivo de la dictadura era eliminar, incluso físicamente, a cualquier voz crítica a aquella dictadura. Los que perdieron la guerra fueron brutalmente represaliados. Y la población tenía miedo, y muy en particular los que perdieron la guerra.
(P.)
Usted ha hecho referencia en sus libros a esta experiencia, incluso a nivel personal
(R.)
Sí. Mis padres eran maestros jóvenes e ilusionados con las reformas educativas que se estaban realizando en Catalunya y en el resto de España durante la II República. Hay una película española que se llama “La lengua de las mariposas”, que es la vida de mis padres en aquel momento histórico. Presenta la enorme ilusión de maestros que amaban a sus estudiantes y el enorme potencial de libertad que suponía la República para ellos. Cuando se estableció la dictadura, les expulsaron del Magisterio, represaliándoles.
Mis padres nunca nos hablaron de su vida y experiencias, ni tampoco de donde estaban nuestros familiares, tíos y tías, que se exiliaron a Francia. No hablarnos a nosotros, sus hijos, era la manera de protegernos. Menos sabíamos, más seguros estábamos. Fue más tarde cuando al ir creciendo se nos fue informando poco a poco. Pero la generación represaliada de mis padres se calló para protegernos a nosotros.
Incluso el año pasado, una lectora me escribió de Gironella, una bella localidad en el Berguedà, al pie de los Pirineos, donde mis padres eran maestros antes de ser expulsados, preguntándome si yo era hijo de los maestros de su madre, a quien le haría mucha ilusión conocerme. Mi hermano y yo fuimos a saludar a la que fue discípula de mis padres, y nos contó mucho sobre lo que mis padres habían hecho durante la II República en aquella población, y lo mucho que se les quería. Y de ello, mis hermanos y yo no sabíamos nada.
Otro ejemplo. No descubrimos hasta mucho más tarde que mis tíos y tías, como miles de españoles, incluyendo catalanes, habían sido detenidos y miembros del maquis antinazi en Francia, siendo uno de ellos apresado en un campo de concentración nazi. De nuevo, hasta al cabo de muchos años no supimos nada de ello. Esta es la historia de la generación que siguió a la de mis padres. Hemos estado descubriendo sus vidas paso a paso. Esta experiencia no la han tenido los herederos de los que ganaron la guerra. Y se les nota.
(P.)
¿Qué quiere decir cuando dice “y se les nota”?
(R.)
Porque cuando escriben sobre la experiencia de los vencidos, incluso los que intentan ser favorables y tener simpatía por los perdedores, lo hacen de una manera que, sin quererlo, es condescendiente.
(P.)
¿Por ejemplo?
(R.)
El libro de Javier Cercas –hijo de lo que en España se llama “los nacionales”- “Soldados de Salamina” narra el relato de un combatiente republicano, su vida, y el olvido que su existencia ha tenido en España. Aplaudí su intento. Es vergonzoso y traduce la baja calidad de la cultura democrática que tales combatientes no hayan sido reconocidos. Y es también vergonzoso que en uno de los contadísimos actos realizados, que tuvo lugar en las Cortes Españolas, el presidente de tal institución, el Sr. Bono, les prohibió ondear la bandera republicana.
Aplaudo, pues, el intento de recuperar la historia. Pero en la manera como Cercas lo hace, hace un flaco favor a su intento. Presenta a la figura central de su libro, un luchador republicano, que luchó en España contra el fascismo y en Francia contra el nazismo, como hicieron miles y miles de españoles –incluyendo familiares míos-. Y le presenta como olvidado, terminando los días en una casa de ancianos, todavía lleno de vida, lo cual expresa Cercas en la frase en la que se refiere a como les toca el trasero a las monjas, bromeando con ellas. Ésta es su imagen de estar “lleno de vida”. Francamente, no me imagino a ninguno de mis familiares tocándoles el trasero a las monjas. Me parece una enorme frivolidad y una falta de respeto al luchador antiascista y también, por cierto, a las monjas.
Pero lo que es más llamativo es que el punto central del libro se sitúa cuando tal luchador republicano tiene frente a su fusil al fascista Sánchez Mazas y, en lugar de dispararle, le perdona la vida. Y esto se presenta como el principio de la reconciliación en España. Muchos artículos han alabado tal descripción. Me alegró ver que el hijo de tal luchador, cuya historia se basaba en un personaje real, protestara de cómo se había presentado a su padre, diciendo que le pareció errónea la descripción del comportamiento de su padre, pues seguro que en la vida real le habría disparado, como habría hecho cualquier luchador republicano. Señalar este hecho inmediatamente genera la crítica de que los perdedores estamos pidiendo venganza o revancha. Y dejar de pedir justicia se ve como un acto de reconciliación digno de aplauso.
(P.)
Usted ha sido también crítico con el libro “Pa Negre” y su película.
(R.)
Quisiera hacer aquí una aclaración, diferenciando la parte teatral y artística de la película –que me pareció excelente, digna de más un Oscar- y el contenido y sujeto de la misma, basado en un libro con cuya tesis estoy en desacuerdo. Refleja el punto de vista tan extendido de que en la Guerra Civil no había ni buenos ni malos, lo cual se promueve por los que antes consideraban a los vencedores como los buenos y ahora, en su reflexión y revisión histórica, llegan a admitir que también eran malos. Todo antes de llegar a la conclusión, históricamente válida, de que sí que había buenos –los que perdieron la guerra- y malos –los que la ganaron-. Esta obviedad es todavía hoy negada en España. El hecho de que los republicanos hicieran barbaridades –aunque en número mucho menor que los fascistas- no niega la bondad de su causa. Los aliados bombardearon Dresden, lo cual merece una condena. Pero ello no niega que la causa de los aliados –los vencedores de la II Guerra Mundial- era justa y la de los fascistas y nazis era injusta. Esta realidad todavía no ha calado en España, donde los malos ganaron y los buenos perdieron la guerra. T Todavía hoy la bandera republicana continúa prohibida en España, mientras que la bandera española es la que enarbolaron los golpistas añadiéndole el símbolo fascista. El hecho de que éste haya desaparecido, no hace a la bandera llamada española más aceptable que la republicana, la bandera que significa las aspiraciones para la libertad, justicia y democracia en España
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La historia de la fuga de Edward Snowden de Hong Kong,

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Nuestro hombre en Quito

Pepe EscobarAsia Times Online 



HONG KONG. Entonces, será Nuestro Hombre en Quito. La narrativa puede no tener la elegancia de las de Graham Greene, pero el enredo le gana, sin duda, al de la trilogía Bourne, porque está aconteciendo en vivo, en tiempo real, frente a nuestros ojos.
 Un solo ex-agente de la CIA para derrotar la “inteligencia” de los EEUU, o mejor dicho, la carencia de inteligencia.
La historia de la fuga de Edward Snowden de Hong Kong, es cosa para estudiar y aprender. El domingo, en un restaurante de Hong Kong [1] fui alertado por una fuente: “Prepárese para algo grande; él saldrá en cualquier momento.” En Hong Kong, eran las 12h30, hora local. En realidad, Snowden ya había despegado del aeropuerto Chek Lap Kok, en el vuelo SU 213, destino a Moscú, a las 11:00h. Pero nadie lo sabía.

Hong Kong aún digería la primera página del South China Morning Post, que exhibía pruebas todavía más devastadoras del ciber-espionaje de los EEUU contra China. 
A las 14:00h, hubo la primera alerta en el South China Morning Post: él estaba en un avión, rumbo a Moscú. Telefoneé a la redRussia Today en Moscú: no sabían; y se pusieron en movimiento. En la empresa-prensa occidental persistía el más ensordecedor silencio. Hasta que, al final, el Post informó, con algún detalle. Pero demoró épocas, antes de que la Agencia Reuters, al final, distribuyese un despacho corto. Cuando la ‘comunidad internacional’ comenzó a recibir noticias de Snowden, él ya estaba volado desde hacía cinco horas.


Asia Times Online también fue informada por una fuente muy próxima de Snowden, que una rápida parada en Hong Kong fue siempre parte del Plan A: él jamás pensó pedirle asilo político ni a Hong Kong ni a China. Siempre estuvo enfocado en “un tercer país”. Pero Snowden usó Hong Kong como plataforma ideal para revelarle al mundo como operan los intestinos del estado-de-vigilancia-orwelliano/Panopticon-EEUU. 



Primero, un bloque de revelaciones genéricas, para The Guardian . En seguida, se sumergió en la clandestinidad para preparar la fuga, porque sabía que Washington partiría contra él con uñas y dientes (¿y drones?).

Entonces, otro conjunto de revelaciones, al diario South China Morning Post, enfocadas en Asia y China. Cuando Washington se despertó, Snowden ya había abandonado el edificio. Jason Bourne puede zapatear de rabia.


No se trata de “dejamos escapar a Snowden”. Todo fue cronometrado meticulosamente, en una operación que involucró a Snowden y al gobierno de Hong Kong, con la mediación de WikiLeaks. La declaración del gobierno de Hong Kong fue distribuida a las 16h05 [2] (vale repetir: Snowden ya estaba viajando hacía cinco horas). Allí se leía que “[El Sr. Edward Snowden] dejó Hong Kong hoy día, por decisión personal, hacia un tercer país, por vía legal e normal”, porque el gobierno no recibió “información legal suficiente para considerar el pedido de los EEUU”, que pedía la prisión preventiva de Snowden.


Esto quiere decir: el gobierno de los EEUU supuso que simplemente podría intimar al gobierno de Hong Kong: haz lo que ordenamos, o sal del frente... ¡y justo en el día en que los crímenes de hacking en serie de los EEUU contra Hong Kong y China eran titulares de los diarios!

Snowden ya estaba viajando desde hacía cinco horas rumbo a Moscú, y la prensa-empresa norteamericana aún cacareaba la narrativa oficial – repitiendo, como el Consejero de Seguridad Nacional de Obama, que Snowden esta(ría) con la cuerda en el pescuezo. 

Si Beijing tuvo o no influencia indirecta sobre la decisión del gobierno de Hong Kong es una cuestión abierta a un Mar del Sul de China de especulaciones.

El hecho es que la solución fue perfecta para Hong Kong, que pasaría a enfrentar la presión total de los EEUU para extraditarlo, pero también para Beijing, que continúa mandando en el juego y exige furiosamente explicaciones sobre las acciones de la Agencia de Seguridad Nacional de los EEUU para espiar a las empresas chinas de telefonía, la rede Asia-Pacífico de fibra óptica [3] y hasta la Universidad Tsinghua [4] de Beijing.

Queda la cuestión del pasaporte norteamericano de Snowden, revocado el sábado. Dependiendo de cuando, exactamente, Hong Kong fue oficialmente notificada, es posible que haya habido una estrecha franja de tiempo, y Snowden haya conseguido presentar un pasaporte válido en la mesa de check-in de la Aeroflot en el centro de Hong Kong, digamos, a las 09:00 hrs. de la mañana del domingo, antes de los 20 minutos de tránsito hasta el aeropuerto Chek Lap Kok.
 También es posible que WikiLeaks haya conseguido otro tipo de arreglo legal. O el consulado ruso en Hong Kong, que permanece perfectamente callado.¡Es un complot de los comunistas!
La furia previsible en el Capitolio, llena de retórica contra las “naciones hostiles” combinada a la inevitable demonización del presidente da Rusia Vladimir Putin, para no hablar del espía-jefe, el general Keith Alexander de la Agencia de Seguridad Nacional, además de las banalidades de siempre sobre “defender esta nación contra un ataque terrorista”, presentando a Snowden como “un individuo que, en mi opinión, no actuó movido por un propósito noble”, todo suena como novela de espionaje barato.

Al imperio no le gusta recibir un derechazo en el ojo. Para Washington, sólo queda esperar que Moscú detenga a Snowden. Boberías. El ministro de RREE de Rusia Sergey Lavrov ya dijo que Rusia, si consideraría la posibilidad de darle asilo político a Snowden, si le fuese pedido. Y la frase de Dmitry Peskov, portavoz de Putin, “¡No sé nada de nada!”, no tiene precio. La red Xinhua, a su vez, como era de prever, declaró: “Antes, Washington debe explicar las grabaciones”.

Los EEUU, que desde hace mucho tiempo intentan pasar por la víctima inocente de los cibercriminales, aparece ahora como el más grande rufián de nuestra era.

Ahora se juega la etapa final de la “Aventura Snowden”, después de dejar la cápsula-hotel que le acogió en el terminal E del aeropuerto de Sheremetyevo (the Four Seasons it ain't) y embarcar rumbo al asilo político del Ecuador, vía La Habana. Y con WikiLeaks tuiteando alegremente en los momentos clave de la saga, como en la declaración oficial: “Snowden sigue rumbo a la República del Ecuador, por una ruta segura, en busca de asilo. Viaja con escolta de diplomáticos y los abogados de WikiLeaks.” 


La decisión de Hong Kong “decepcionó” al Departamento de Justicia de los EEUU y, como informa Russia Today, [5] los EEUU ya están pidiendo gentilmente que los países latino-americanos detengan a Snowden. En la misma línea cordial, todos los países del mundo deben “pedir gentilmente” que Washington le ponga fin a su Imperio Mundial de Bases Militares.



En medio de la excitación provocada por el ‘caso Snowden’, que no se pierda el foco. El aspecto más crucial de la historia es que Obama es el Espía Supremo, mientras Keith Alexander jura que el complejo militar/seguridad orwelliano privatizado, sería esencial para evitar acciones terroristas. Mentira monumental. Obama se dejó ver como el mentiroso-en-jefe y cómplice.

El ex-embajador Joe Wilson y su esposa Valerie Plame Wilson – dimitidos por la banda de Dick Cheney – no se extraviaron ni dejaron pasar la oportunidad, en una columna muy oportuna, en The Guardian [6] .

Siendo así, rumbo a Quito, el peligro existe y ronda en todos lados. Pero, llegado a Quito, el punto, el set, el juego estará ganado, como ya dijo en esa entrevista [7] . Que la HBO comience a seleccionar las estrellas de la película, y rápido. Con Ryan Gosling en el papel principal. Edward Snowden, claro está, escribirá el guión.

Notas:
[1] Orig. “at dim sum”. Sobre esto ver http://es.wikipedia.org/wiki/Dim_sum [NT]
[2] En portugués en http://redecastorphoto.blogspot.com.br/2013/06/governo-de-hong-kong-sobre-edward.html [NTs].
[3] http://www.scmp.com/news/hong-kong/article/1266875/exclusive-us-hacked-pacnet-asia-pacific-fibre-optic-network-operator
[4] http://www.scmp.com/news/china/article/1266892/exclusive-nsa-targeted-chinas-tsinghua-university-extensive-hacking
[5] http://rt.com/news/snowden-us-russia-expel-139/
[6] http://www.guardian.co.uk/commentisfree/2013/jun/23/nsa-intelligence-industrial-complex-abuse
[7] http://www.youtube.com/watch?v=ORAW7ZYaXwk
Traducido por Luis Casado para Tlaxcala
Fuente: http://www.atimes.com/atimes/World/WOR-02-240613.html


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sábado, 22 de junio de 2013

Un artículo de Rafael González Morera

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Opinión


Rafael González Morera

Fiscales defensores

Periodista

Rafael González Morera 


Tenía entendido que los fiscales en cualquier justicia justiciera eran los acusadores y no los defensores, que para eso están los abogados, incluso los del diablo. Bueno, también los abogados pueden ser acusadores, pero eso son abogados de dios, no del diablo. El fiscal es el funcionario público que lleva la investigación de los delitos y el ejercicio de la acción penal pública, es el que acusa en un proceso penal. Debe presentar las pruebas ante el juez para que el delito se castigue, pero también debe defender los derechos del acusado. Lo que ocurre es que a veces los defienden con mucho calor, y otras con poca convicción. Eso es lo que dice Pablo Crespo, el número dos de la mafia de Gürtel, que afirma que le habría gustado que el fiscal que le tocó en suerte se hubiera ocupado de defender sus derechos como lo ha hecho el fiscal de Miguel Blesa.
Pero claro, pienso ingenuamente, que lo peor para Pablo Crespo es que no es amigo íntimo de José María Aznar, que sí lo es de Miguel Blesa, y dos acciones preferentes. Dicho sea de paso, Pablo Crespo ha reconocido que en su época de dirigente del PP gallego le entregó al entonces tesorero Álvaro Lapuerta de un zapatazo 21 millones de euros, aparte de otras cantidades mondas y lirondas en otras liquidaciones clandestinas, y además el tal Crespo afirmó sobre los regalos que reciben altos cargos del PP que “son regalos que se hacen en las relaciones comerciales con clientes”. Un reconocimiento implícito que el PP Sociedad Anónima es una gran casa comercial. Pero sigamos con el asunto/trasunto de los fiscales, y otra confusión ha sido la posición del fiscal del sumario Noos que afecta a Urdangarín y su señora esposa, Cristina Borbón.
Pedro Horrach decidió no imputar a la ciudadana Cristina Borbón, mientras que si lo hizo inicialmente a la ciudadana Ana María Tejeiro, esposa de Diego Torres, socio de Iñaki Urdangarin. Claro que ahora la Agencia Tributaria, es de decir Hacienda, es decir el Gobierno que preside Mariano Rajoy, ha decidido no imputar a ninguna de las dos por la comisión de delitos fiscales. Y digo yo; ¿es un nuevo error de la Agencia Tributaria, una acción desacertada, equivocada, un patinazo o metedura de pata? Si la Agencia Tributaria atribuladamente se equivocó en las fincas y propiedades que vendió pero no vendió, que no eran Cristina Borbón, vaya usted a saber si de nuevo ha habido un error que puede ser subsanable mediante un contraasiento contable (deformación de mis tiempos en la Escuela de Comercio).
Lo cierto es que de momento Hacienda ha remitido al juez Castro un informe en el que se afirma que los responsables de todo el asunto/trasunto sin discusión son Iñaki Urdangarin y Diego Torres. Me da a mí que las dos palabras “sin discusión” fueron añadidas por el gracioso ministro Cristóbal Montoro a última hora antes de que el documento saliese para la Audiencia de Palma de Mallorca y para el despacho del juez Castro, y el objetivo es que al muy ministro gracioso no le discutan más este asunto/trasunto, y digo lo de gracioso porque cada vez que sale en la tele Montoro dando explicación (sic) a algo me mondo de la risa. En fin, que empezamos por los fiscales y terminamos con lo jocoso que es el ministro de Hacienda.

Investigan a la Sanidad en Madrid

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LA PRIVATIZACIÓN DE LA SANIDAD

Juan José Güemes, Manuel Lamela y Esperanza Aguirre, en un acto oficial en febrero de 2008.Juan José Güemes, Manuel Lamela y Esperanza Aguirre, en un acto oficial en febrero de 2008. EFE

Un juez investiga quién está detrás del gigante de la sanidad privatizada en Madrid


El titular del Juzgado número 4 de Madrid, Marcelino Sexmero, cursa una comisión rogatoria para tirar del hilo de la compleja red societaria de Capio, cuyos dueños se ocultan en el paraíso fiscal de las Islas Caimán, como desveló infoLibre. El magistrado admite a trámite una querella de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid que supone la imputación de la cúpula de Sanidad en la etapa de Aguirre, entre ellos los exconsejeros Manuel Lamela y Juan José Güemes, por hasta ocho delitos. PSOE e IU exigen al Gobierno de Ignacio González que paralice de forma inmediata el proceso privatizador de seis hospitales.

viernes, 21 de junio de 2013

Entrevista con el abogado chileno defensor de los derechos humanos Roberto Garretón

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Herencia maldita: "Todavía está gobernando el dictador Augusto Pinochet"

Marina GonzálezLa Diaria, Montevideo



El abogado chileno Roberto Garretón, jefe del Departamento Jurídico de la Vicaría de la Solidaridad durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y actual integrante del consejo directivo del Instituto Nacional de Derechos Humanos de su país, opinó, en dialogo con la diaria, que Michelle Bachelet "hizo las cosas mal" cuando fue presidenta entre 2006 y 2010, cosa que espera que cambie si la ex mandataria es reelecta en las elecciones de noviembre.

Garretón es católico, ex demócrata cristiano. Con el golpe de Estado del 11 de setiembre de 1973 contra el presidente Salvador Allende comenzó su larga carrera en defensa de los derechos humanos dentro y fuera de Chile. Empezó en dictadura al frente del servicio jurídico de la Vicaría de la Solidaridad, y ya en democracia fue embajador de Ricardo Lagos para los Derechos Humanos y ocupó varios cargos en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Fue el autor del "informe de hecho", presentado en 1999 ante la Cámara de los Lores de Reino Unido cuando Chile reclamaba la extradición del dictador Augusto Pinochet, detenido en Londres a pedido del juez español Baltasar Garzón. El informe de Garretón concluía que Pinochet no podía ser juzgado en Chile; lo llamó "informe de hecho" porque estimaba que "en derecho" se suponía que el ex gobernante de facto podía ser juzgado en su país.

Actualmente Garretón es miembro del directorio del Instituto Nacional de Derechos Humanos de Chile y del Grupo de Trabajo del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre Detenciones Arbitrarias. A todo lo anterior este abogado de 71 años suma la militancia en colectivos y organizaciones: ocupa un cargo directivo en la Fundación Instituto de la Mujer y es director de la Corporación Harald Edelstam de Chile, entidad que homenajea al embajador sueco que, entre otros, ayudó a liberar a los uruguayos presos en el Estadio Nacional de Santiago después del golpe pinochetista.

El encuentro de la diaria con Garretón fue a la salida de una entrevista realizada en Radio Uruguay, antes de ir hasta el café Sportman, donde se realizó esta entrevista. Garretón, declarado Ciudadano Ilustre de Montevideo en 2006, en esta ocasión viajó a Uruguay con motivo de la Reunión de Altas Autoridades en Derechos Humanos y Cancillerías del Mercosur y Estados Asociados que se celebró la semana pasada. Su viaje coincidió "por milagro", dice, con la visita de Garzón, con quien participó, a pedido de la ex vicecanciller Belela Herrera, de la mesa redonda "El derecho internacional de los derechos humanos y el terrorismo de Estado", en el paraninfo de la Universidad de la República.

-¿Cómo ve la situación en su país respecto de los derechos humanos, a casi 40 años del golpe de Estado?

-Veo un cambio esencial. La diferencia es del cielo a la tierra, pero todo lo que se ha hecho sigue siendo muy poco. Leyes de reparación ha habido, aunque no son las ideales, son pensiones de gracia decentes pero no verdaderamente reparativas. Hay otros beneficios en materia de salud para los que fueron víctimas de violaciones a los derechos humanos y sobrevivieron, hay algunas becas estudiantiles para hijos y nietos de ejecutados o descendientes de desaparecidos, algunas pensiones para quienes fueron despedidos de sus funciones, que perdieron su trabajo con el golpe, y para aquellos que fueron víctimas de prisión política y de tortura. El problema está en que la institucionalidad pinochetista no ha sufrido todas las modificaciones que nosotros quisiéramos. Seguimos con una Constitución inmoral.

-Precisamente le quería preguntar sobre ese tema.

-Yo pertenezco a un movimiento que reclama el cambio constitucional. La idea es, en el voto para las presidenciales, escribir en la papeleta las letras AC, de Asamblea Constituyente.

-¿Eso no significa anular el voto?

-La ley lo permite. Dice lo siguiente: son nulos solamente los votos que tienen más de una preferencia. Si yo voto por el candidato uno y el candidato dos, no se sabe para cuál de los dos es. Ése es nulo; todos los demás son válidos. Dice la ley expresamente: "Las cédulas que contengan, además de una sola preferencia, nombres, dibujos, garabatos, serán válidas"; podrán ser objetadas, pero son válidas. Ese movimiento lo fundé yo.

-¿Cómo se llama?

-En un momento se llamó Movimiento por una Asamblea Constituyente, pero no tiene un nombre fijo. Ahora lo tenemos más institucionalizado con la campaña Marcatuvoto [http://marcatuvoto.cl/]. Hoy en día no es exactamente el mismo movimiento que yo había fundado en 2001, pero sí ha tenido mucha importancia y están desesperados los pinochetistas, porque ven que si gana Bachelet y si todos marcamos el voto, quiere decir que habría mayoría para cambiar la Constitución.

-Hay quienes dudan de que eso pueda ocurrir, incluso con la Concertación en el gobierno. ¿Es posible una Asamblea Constituyente en Chile?

-Sí. El problema es que si no es por Asamblea Constituyente no podemos cambiar la Constitución, porque fue hecha para que no se modifique nunca, a menos que los pinochetistas estén de acuerdo.

-¿Cómo es eso?

-Para modificar las partes esenciales de la Constitución se necesitan dos tercios de la Cámara de Diputados, dos tercios del Senado y dos tercios del Congreso (Cámara y Senado). ¿Cómo vas a lograr esos dos tercios si en cada distrito se eligen dos parlamentarios y en cada circunscripción senatorial se eligen dos senadores? Uno va a ser de la primera mayoría, otro de la segunda mayoría.

-Es decir que siempre hay uno del oficialismo y otro de la oposición.

-Resultado: para que tú saques los dos necesitas doblar al otro [candidato], necesitas 67% de los votos, y los terceros no existen. Entonces es imposible cambiarla. Tenemos que hacerlo por una vía no constitucional, y que nadie se escandalice: todas las asambleas constituyentes de la historia de la humanidad han sido rupturistas. Los fascistas quieren siempre identificar Asamblea Constituyente con [el ex presidente venezolano, Hugo] Chávez, con [el presidente boliviano, Evo] Morales y con [el presidente de Ecuador, Rafael] Correa. No se refieren a Brasil, a Paraguay, a Perú en 1979, a Colombia -una constitución espectacular, a pesar de que [Álvaro] Uribe trató de demolerla-. Para ellos sólo hay tres, y la Asamblea Constituyente es demagogia y caos. No es por ignorancia que lo hacen, es de mala fe, porque no les conviene.

-Más allá de lo simbólico: ¿qué es lo que contiene la Constitución que hace que haya que cambiarla?

-Primero, no representa la voluntad popular. Para que la voluntad popular se imponga tenés que poner dos tercios, eso no es respetar la voluntad popular. El derecho humano a la libre determinación de los pueblos, consagrado en el artículo primero del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y en el artículo primero del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, el único artículo común en los dos pactos dice: "Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural". Segundo, te da rabia que sea un texto de Pinochet. Tercero, hay además leyes orgánicas constitucionales y leyes de quórum calificado que también requieren quórum alto, no dos tercios, pero alto. Por ejemplo, para suprimir el lucro de la educación necesitamos una ley orgánica constitucional con mayorías altas que hacen que si los fascistas votan en contra ya no va.

¿Qué tiene la Constitución sobre educación que habría que cambiar? ¿Eso podría responder a los reclamos estudiantiles?

-Los estudiantes han denunciado esto: establece en primer lugar la libertad de enseñar más que el derecho a la educación. Refuerza la libertad de fundar escuelas, y los pobres no pueden fundar escuelas. Ahí está uno de los principios. Se hizo una trampa una vez [durante el actual gobierno de Sebastián Piñera], porque era tan grave la protesta estudiantil que los fascistas decidieron ceder un poco. La ley orgánica de educación redactada por Pinochet no ha sido modificada porque no están dispuestos a tocarla. Cambiaron la ley general de educación, que es posible cambiar como una ley común, pero lo hicieron a gusto de los fascistas, porque si no, no la votan. Hay que entender: allí todavía está gobernando Pinochet.

-¿Por qué dice eso?

-Porque la Constitución hecha por él es la que guía tu vida. Es la que te concede los derechos. No concede el derecho al trabajo, habla de la "libertad de trabajo", que es el derecho de fundar empresas. Es una Constitución... 

-Muy liberal.


-En el peor sentido de la palabra. Porque yo también soy liberal [se ríe]. En lo económico seré poco liberal, pero soy liberal.

-La ex presidenta Michelle Bachelet es favorita para las elecciones de noviembre como candidata de la Concertación, opositora al actual gobierno conservador. ¿Cree que si asume para un nuevo mandato, esta vez va a haber un cambio drástico? Ya gobernó entre 2006 y 2010...

-Gobernó y lo hizo mal. Terminó cediendo muchas cosas al pinochetismo. Una práctica no democrática común a todos los gobiernos de la Concertación es buscar los consensos. Por ejemplo, yo gobierno y se me ocurre un proyecto de ley genial, lo anuncio, propongo que se discuta y los fascistas dicen: "Bueno, pero sin esto, sin esto y sin esto". A la mierda el proyecto... Entonces el gobierno manda una porquería que se aprueba, y se celebra como triunfo lo que es una aplastante derrota.

-¿Me puede dar un ejemplo?

-El sistema de salud. Se creó un programa de salud que se llama AUGE [Acceso Universal de Garantías Explícitas]. Era un excelente proyecto que había propuesto [el ex presidente] Ricardo Lagos [2000-2006], que tenía un pilar solidario, es decir, que el Estado se iba a meter allí. Pero los pinochetistas dijeron: "No, el proyecto pero sin pilar solidario, sin que se meta el Estado", y así se aprobó. El gobierno de Lagos celebró como un triunfo histórico una derrota terrible. Siempre buscan no perder. Eso no es democrático: los gobiernos tienen que jugar a ganar y si pierden, que pague el otro. Espero que la lección se aprenda, que si queremos un proyecto así, que sea así o nada, y que sean ellos los culpables si no se aprueba.

-¿Cree que es posible que la derecha gane las próximas elecciones en Chile?

-No creo. Están con un tono agresivo digno de la mejor época de Pinochet, y son pinochetistas aunque digan que no lo son. [El actual presidente conservador, Sebastián] Piñera, que siempre anda diciendo que votó por el No en el referéndum [en el año 1980] para prorrogar el mandato de Pinochet [en el que ganó el Sí], es un pinochetista puro. Lo acaba de reconocer sin darse cuenta.

-¿Qué dijo?

-Dijo que durante el gobierno del "presidente" Pinochet (primera cosa que no aceptamos) "hubo cosas buenas y cosas malas". ¿Té puedes decir que Hitler hizo cosas buenas y cosas malas? Todos los gobiernos hicieron alguna cosa buena, o dos (para que sea en plural), pero eso no es forma de hablar de un gobierno. Evaluar así a la dictadura de Pinochet es estar de acuerdo con lo que hizo.

-Un tema candente en Chile respecto de los derechos humanos es el de los indígenas mapuches que llevaron ahora su causa ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. ¿Cómo ve esa situación?

-El caso de la Corte no lo he seguido mucho. Pero el caso del movimiento mapuche lo trataron muy mal los gobiernos de la Concertación y mucho peor Piñera. El problema está en que los gobiernos de la Concertación hacían mucho amiguismo y aplicaban cuotas de partido, entonces nadie que conozca el drama de los pueblos mapuches intervino para buscar alianzas o acuerdos con ellos. Ahora hay unas iniciativas que se han desarrollado, impulsadas por la Iglesia Católica, con las que algo se avanza, pero muy poco. El gobierno no entiende. Son territorios que ellos [los mapuches] reclaman como propios, pero como son muy buenos negocios, es lo único que ven. Es una posición inaceptable y la Concertación tampoco hizo mucho más.

-¿Cree que no hará mucho más en un eventual próximo gobierno?

-Yo creo que sí, que va a hacer más. El problema es que la crítica que hay sobre el tema es de la izquierda más dura. Espero que Michelle entienda que esa izquierda más dura era partidaria de ella hace cinco años y que también tiene que escucharla y entender los problemas que plantea. Esa izquierda ahora está haciendo una campaña en contra de Piñera, de la Constitución, de Bachelet y de todo, más que otra cosa. Además, no van a votar y no van a lograr inscribir a sus candidatos porque no tienen el número de firmas necesario. Entre Gustavo Ruz [uno de los líderes del movimiento a favor de la Asamblea Constituyente] y Marcel Claude [actual precandidato por el Partido Humanista] llegarán a 10.000 votos en el país y les da lo mismo que gane un pinochetista o que gane Bachelet: dicen que es todo lo mismo, que son las dos derechas.

-¿La población chilena tiene simpatía con la causa mapuche?

-Cada día más. Las encuestas han dado que 75% de los chilenos está a favor de satisfacer las demandas mapuches.

-Eso puede tener su peso también para un próximo gobierno.

-Claro. Pero los mapuches no reconocen que la sociedad chilena no mapuche los apoya en su mayoría.

-Otro tema gira en torno a un proyecto de ley sobre la protección a carabineros y policías, firmado por el presidente Piñera a fines de mayo y que considera delito el insulto a un carabinero.

-Durante la dictadura había leyes de Justicia Militar que contemplaban con sanciones muy altas la ofensa a las Fuerzas Armadas, agresiones de hecho o de palabra. Agresión de hecho es resistirse a la detención. Yo mismo fui preso y procesado por ofensa a las Fuuerzas Armadas, por un artículo sobre la Justicia Militar que escribí en una revista de los jesuitas. La Justicia Militar me sometió a proceso y me condenó en primera instancia a un año y medio de cárcel. Cuando volvió la democracia se modificaron esas leyes que estaban en el Código de Justicia Militar, las leyes especiales. Se estableció que a los civiles los juzgan los civiles y se bajó la penalidad del delito de ofensa a las Fuerzas Armadas.

-¿Qué es lo que se quiere hacer ahora?

-Se quiere hacer exactamente lo que se deshizo: Piñera lo quiere volver a instalar. Es muy siniestro. Si quieren hacer eso, perfecto, pero entonces si un carabinero me agrede a mí, que tenga la misma pena, y más alta, porque tiene más responsabilidad que yo.

-Siguiendo en el ámbito de la Justicia, ¿cómo ve el avance de los casos por los crímenes de la dictadura en su país?

-Hay progresos muy importantes. Hasta el 16 de octubre de 1998 no se había hecho nada. Había condenas en dos juicios solamente. En uno de los casos, porque el asesinato se había cometido en Washington y eso no se hace, por lo que Estados Unidos presionó y hubo justicia. Es el caso de Orlando Letelier, que fue canciller de Allende, asesinado en Washington por la Dina [Dirección Nacional de Inteligencia de la dictadura]; condenaron a los culpables a siete años, pero los condenaron. Después hubo un par de procesos más, por el asesinato de un compañero nuestro de la Vicaría de la Solidaridad, José Manuel Parada [es el caso conocido como "los degollados" de 1985, cuando murieron del mismo modo también dos integrantes de la Asociación Gremial de Educadores de Chile, el pintor Santiago Esteban Nattino Allende y el profesor Manuel Leonidas Guerrero Ceballos]. Pero desde el 16 de octubre de 1998, cuando Pinochet fue detenido en Londres, los jueces chilenos comenzaron a tomar todos los argumentos que nosotros estábamos invocando desde 1973 y que habían rechazado hasta entonces. En ese momento todo cambió y 80% de los jueces que tenían competencia en estas cosas comenzaron a procesar y a condenar. Entre procesados y condenados hay cerca de 800 militares y dos civiles.

-O sea que está faltando investigar a los civiles.

-Están faltando los civiles, los hipócritas digamos, porque los militares fueron menos hipócritas. Así que son unos 800. Manuel Contreras [ex jefe de la Dina] está condenado por 20 o 25 juicios a unos 300 años de cárcel, pero las penas son bajas. No es como en Argentina, donde hay muchos menos procesados, pero casi todos condenados a perpetua o a 30 años. Lo de Manuel Contreras es porque se trata de una veintena de causas, pero en cada una son diez o 15 años. No es lo mismo. Hay muchos procesos abiertos todavía. Los jueces hicieron algunas trampas para bajar las penas.

-Se les aplicaban reducciones de penas.

-Claro. Pero eso ya no lo están aplicando, las penas volvieron a subir y se dejaron de aplicar las atenuantes. Pero fíjate que en este momento hay entre 1.000 y 1.100 causas por violación de los derechos humanos, entre los casos cerrados y abiertos. Las víctimas son 5.000, es un porcentaje muy alto de causas que se están siguiendo, mucho más que el porcentaje argentino.

-Son las víctimas que apelaron a la Justicia, puede haber gente que no presentó denuncia.

-Casi todas se presentaron. En Chile pasó una cosa fantástica durante la dictadura. Tiene que ver con el rol de las iglesias católica, luterana, metodista, metodista pentecostal, bautista, ortodoxa y el Gran Rabinato de Chile; todas juntas formaron el Comité de Cooperación para la Paz [también conocido como Comité Pro Paz]. La Vicaría de la Solidaridad viene después y es sólo de la Iglesia Católica. Este organismo, el comité, comienza a funcionar el 6 de octubre [1973]: vamos a celebrar también 40 años de la defensa de los derechos humanos en Chile. Veinticinco días después del golpe de Estado, estas iglesias, que en milenios no se han hablado, hicieron esto. Pero al final, todas estaban llenas de problemas internos, porque también había pinochetistas dentro de ellas. Además se produjo un incidente muy fuerte: Pinochet le dijo al cardenal Raúl Silva Henríquez que disolvía el comité. Fue un alivio para él, porque estaban todas las iglesias conflictuadas por dentro. Pero dijo: "Nadie me puede impedir que yo siga defendiendo los derechos humanos de las personas perseguidas", y entonces fundó la Vicaría de la Solidaridad dentro de la Iglesia de Santiago. Ahí había abogados comunistas, asistentes sociales socialistas, masones, judíos, de todo. Las dos cosas fueron hechos fantásticos.

-¿Usted es católico?

-Soy católico, pero crítico de muchas cosas. En Argentina no fueron capaces de hacer ni eso ni nada. En Chile se dio esa circunstancia gracias a la figura providencial del cardenal. Entonces la gente supo que tenía dónde protestar y las colas [de gente que iba a denunciar abusos] a veces eran enormes. A eso se une otra cosa: la personalidad de Salvador Allende como líder. Tenía apoyo de gran parte de los países del mundo por ser un demócrata que quería instalar un régimen socialista pero con pleno respeto a los derechos democráticos. Eso hacía que fuera un personaje fascinante en todo el mundo y su autoeliminación (y yo creo que es eso) fue un signo aun mayor de coraje. Eso hizo que se le brindara mucha ayuda a Chile. Pinochet decía que era el oro de Moscú. ¡No! Era ayuda de Estados Unidos.

-¿De Estados Unidos?

-No del gobierno. De organizaciones, de fundaciones, de iglesias estadounidenses, protestantes en la mayoría, católicas, pero también de toda Europa. Esa ayuda no la recibió ni Argentina ni Uruguay, sí hubo algo con Brasil, nada con Bolivia. Además, el día del golpe de Estado todo el exilio latinoamericano estaba en Chile o en México. Pero era más fascinante para un socialista participar en la construcción de un régimen socialista democrático, entonces la inmensa mayoría estaba en Chile, donde fueron muy perseguidos.

-¿Usted era allendista?

-Yo era opositor a Allende hasta el día del golpe. Desde ese día soy allendista. Yo era demócrata cristiano, pero ahora no. Ahora estoy bastante más a la izquierda de la propia Unidad Popular [la coalición por la que fue elegido Allende].

Fuente: http://ladiaria.com.uy/
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El PSOE pisa el acelerador de la memoria histórica y ya se cuestiona la Ley de Amnistía de 1977

Los socialistas andaluces estudian promover una moción parlamentaria de adhesión a la querella argentina por los crímenes del franquismo, igual que acaba de hacer el Parlamento vasco,  y comienza a extenderse la idea de que habrá que derogar la 'ley de punto final' española que impide enjuiciarlos

RAFAEL GUERRERO Sevilla 21/06/2013 07:21 Actualizado: 21/06/2013 08:52

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En un coloquio de Canal Sur Radio coinciden, de izquierda a derecha, Carlos Perales (PSOE), Cecilio Gordillo (CGT), Rafael Guerrero y Juan Francisco Arenas (PCA).

En un coloquio de Canal Sur Radio coinciden, de izquierda a derecha, Carlos Perales (PSOE), Cecilio Gordillo (CGT), Rafael Guerrero y Juan Francisco Arenas (PCA).

"Al final habrá que derogar la Ley de Amnistía". Así se ha expresado públicamente Carlos Perales, coordinador de los grupos de memoria histórica del PSOE de Andalucía. Una afirmación inédita en un dirigente socialista que confirma que algo sustancial está cambiando en la política memorialista de este partido que, hasta la presente, no se había atrevido a cuestionar laley de punto final española de 1977 que impide enjuiciar el genocidio franquista.
Distintas evidencias confluyen para abonar la idea de que el PSOE ha decidido pisar el acelerador de la memoria histórica tras haber constatado el fracaso de la Ley de Memoria Histórica impulsada por Zapatero y aprobada a finales de 2007, con la oposición de un PP que tras ganar las elecciones de 2011 la ha terminado de vaciar de contenido. El hecho más llamativo y novedoso a nivel institucional proviene del Parlamento vasco que, con una mayoría de votos nacionalista y socialista, acaba de aprobar esta semana una moción de adhesión a la querella argentina para investigar los crímenes del franquismo. El resto de los indicios del giro de la política memorialista del PSOE surge de Andalucía, la comunidad más poblada de España que con el Gobierno de coalición PSOE-IU ha visto acentuada su tradicional gestión política de izquierdas.
"Con el PSOE en el Gobierno se tomaban medidas memorialistas y el partido quedaba al margen de la política global de la memoria"
Con el debate parlamentario del proyecto de Ley de Memoria Democrática previsto tras el verano, los socialistas andaluces cambian el chip para replantearse sus objetivos y sus límites. Desde primero de año se han reactivado los grupos de memoria histórica creados hace 5 años y que permanecieron después aletargados sin reunirse. "Con el PSOE gobernando en España y en Andalucía, se tomabanmedidas memorialistas y el partido quedaba al margen de la política global de la memoria", confiesa Rafael López, médico, nieto de fusilado en Almonte y presidente desde hace 10 años de una importante asociación andaluza de memoria histórica, la AMHYJA. López, que también es coordinador provincial en Huelva del grupo memorialista, reconoce que ahora se celebran con frecuencia reuniones en las agrupaciones socialistas locales y provinciales que reflejan un creciente interés de la militancia por el tema. "Incluso se han dado instrucciones para que los militantes memorialistas entren en las ejecutivas. Está claro que hay un cambio y que un partido donde hay corrientes internas recelosas que no quieren remover el pasado está dando por fin un paso adelante para recuperar el discurso de la memoria como discurso de izquierdas que es", asegura Rafael López.
Además de estos movimiento en la estructura orgánica de base, la dirección regional del PSOE-A también apuesta por el cambio. De hecho, a través de la Fundación Alfonso Peralesse ha constituido en junio un grupo de expertos -fundamentalmente catedráticos de Historia Contemporánea de las universidades andaluzas- que persigue la elaboración de un documento que sirva de base argumental para el posicionamiento oficial socialista en el próximo debate parlamentario sobre la nueva ley memorialista. Tanto la ex ministra Carmen Calvo como el vicesecretario general del PSOE andaluz Mario Jiménez animaron a los expertos en su primera reunión en Antequera a no poner límites a sus reflexiones. "En el marco de este análisis no descartamos la necesidad de crear una Comisión de la Verdad sobre el genocidio franquista como las que se constituyeron en países latinoamericanos que sufrieron sangrientas dictaduras", precisa Fernando Martínez, catedrático y ex alcalde socialista de Almería que coordina este grupo de expertos y que, al igual que Carlos Perales, se muestra convencido de que "antes o después la Ley de Amnistía caerá en España".
Desde primero de año se han reactivado los grupos de memoria histórica creados hace 5 años y que permanecieron aletargados Los socialistas son ahora más permeables a la creciente internacionalización de la cuestión, que surge como consecuencia al portazo dado por el Tribunal Supremo a la investigación judicial en España tras el fallido intento en 2008 del ya exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Desde el PSOE ahora se critica la pasividad en la última etapa de Zapatero en el desarrollo normativo de la Ley de la Memoria Histórica, la lentitud de Ramón Jáuregui con el informe de la comisión de expertos sobre el Valle de los Caídos y, por supuesto, los obstáculos puestos por la Fiscalía a la labor investigadora de la jueza argentina María Servini desde que asumió la causa en 2010 en aplicación del principio de justicia universal.
Ante el actual bloqueo gubernamental y judicial a la memoria histórica en España, los socialistas se van sumando a las iniciativas impulsados por los movimientos sociales más activos. Destacados líderes como Soraya Rodríguez mostraron su solidaridad con Garzón en Madrid, activistas del ámbito memorialista como el onubense Rafael López se sumaron a finales de mayo en Madrid a la constitución de la Plataforma por la Comisión de la Verdad para poner fin a la impunidad del franquismo y, a buen seguro, que más dirigentes del PSOE-A darán su apoyo a la querella argentina que el próximo 13 de julio hará su presentación oficial en Sevilla. "Es más, voy a pedir a la dirección regional de mi partido que el grupo parlamentario socialista promueva una moción en la Cámara andaluza de adhesión a la querella argentina, como han hecho los socialistas vascos", asegura Carlos Perales, consciente de que "las futuras generaciones no merecen heredar esta discriminación entre las víctimas de Franco, que son de segunda categoría si las comparamos a las víctimas del terrorismo de ETA".